Bien dice que su intención es derrocar a Maduro porque de Transición no tiene nada.
Es contradictorio lo que propone con su deseo de hacerlo democráticamente, aunque podríamos debatir sobre si procesos políticos no electorales pero aglutinadores pueden entrar dentro del carácter democrático y especialmente como deberían ser estos para que entren dentro de esa definición.
Las medidas que propone causarían crispación y darían argumentos al régimen de Maduro para dar otra vuelta de tuerca a su régimen, ya que además su respuesta a las crisis y su discurso político se basa en buscar enemigos. Esto último es así porque su movimiento precisa de la confrontación para unir a sus bases y eludir responsabilidades que puedan debilitar su imagen.
La mejor táctica para poner fin a un régimen altamente ideologizado como el venezolano es la moderación desde una posición firme y erosionar la base del régimen. Una oposición unida y firme que sea constructiva evitará maniobras reaccionarias del régimen a la vez que lo tranquilizaran, a la vez que al ir erosionándolo políticamente y ante el desprestigio de su mala gestión perderá apoyos populares mientras que estamentos del régimen se pasarán a la oposición, para esto último es importante que la oposición sepa unir y ofrecer un proyecto integrador.
El camino pacífico es más lento pero más seguro y desde luego preferible teniendo en este caso más garantías de éxito.
Publicado en Mapeando
MIGUEL ÁNGEL
Es contradictorio lo que propone con su deseo de hacerlo democráticamente, aunque podríamos debatir sobre si procesos políticos no electorales pero aglutinadores pueden entrar dentro del carácter democrático y especialmente como deberían ser estos para que entren dentro de esa definición.
Las medidas que propone causarían crispación y darían argumentos al régimen de Maduro para dar otra vuelta de tuerca a su régimen, ya que además su respuesta a las crisis y su discurso político se basa en buscar enemigos. Esto último es así porque su movimiento precisa de la confrontación para unir a sus bases y eludir responsabilidades que puedan debilitar su imagen.
La mejor táctica para poner fin a un régimen altamente ideologizado como el venezolano es la moderación desde una posición firme y erosionar la base del régimen. Una oposición unida y firme que sea constructiva evitará maniobras reaccionarias del régimen a la vez que lo tranquilizaran, a la vez que al ir erosionándolo políticamente y ante el desprestigio de su mala gestión perderá apoyos populares mientras que estamentos del régimen se pasarán a la oposición, para esto último es importante que la oposición sepa unir y ofrecer un proyecto integrador.
El camino pacífico es más lento pero más seguro y desde luego preferible teniendo en este caso más garantías de éxito.
Publicado en Mapeando
MIGUEL ÁNGEL