Cerca de ellos se sitúa el MINT (Méjico, Indonesia, Nigeria y Tailandia), poco conocido hasta ahora pero que ya empieza a sonar como el nuevo polo emergente en detrimento del BRICS, aunque también otros países con potencial que deberían nombrarse y que ya detallaré. No es de extrañar por tanto los intentos del primer grupo por mantener su posición frente a las dudas levantadas y por perder el terreno surgiendo hasta incluso una alternativa.
Para salvarse el BRICS tras muchos años tratando de conseguir peso en el FMI y en el Banco Mundial han decidido crear una aspiración suya que es el Banco de Desarrollo que financiara inversiones suyas y en países subdesarrollados, que contara con un capital inicial de 50.000 millones de Dólares de los cuales cada país aportara una quinta parte. Además se dotaran con una reserva de divisas por valor de 100.000 millones de Dólares para no resultar perjudicados por las devaluaciones de moneda que emprenden varios países desarrollados como EEUU o Japón, poniendo el capital para ello de la siguiente forma; 41.000 millones los aportara China, 18.000 millones respectivamente tanto Rusia como la India y Brasil, mientras que Sudáfrica solo pondrá 5.000 millones.
Empecemos con el análisis de cada país del BRICS: El miembro que más ha decaído del grupo ha sido Rusia que requiere de inversiones extranjeras y ha visto como su economía incluso entraba en recesión, así que ahora que sufre las sanciones de Occidente por haber ocupado Crimea y no hacer nada por estabilizar Ucrania es previsible que su situación empeore. Su aportación al grupo es esencial por su peso político y tecnológico pero sobre todo por sus recursos naturales.
El segundo por la cola es Sudáfrica un país con grandes posibilidades y que saca bastante beneficio de la minería, especialmente de los diamantes, y se han asentado en él varias empresas con el fenómeno de las deslocalizaciones. Es completamente subdesarrollado con una gran brecha social y problemas como la extensión del SIDA. Cuenta con el grave problema de los enfrentamientos en huelgas por mejora de salarios, una galopante corrupción y un vacío espiritual que cubrir por la muerte del líder antiapartheid Nelson Mandela.
Posteriormente nos topamos con Brasil que pese a su gran crecimiento está viviendo una situación límite ya que las inversiones en potenciar su imagen cara al exterior, ejemplo el Mundial de fútbol concluido recientemente, no han sido bien vistas ni su población se beneficia del crecimiento prácticamente. Cuenta con grandes recursos pero esa tensión y la reducción del crecimiento hacen prever tiempos no boyantes para el país carioca.
A continuación se sitúa la India que es una nación metida de lleno en el subdesarrollo pero con unas capacidades tremendas. No crece tanto como cabría esperar pero el país hindú en todos los sectores incrementa su posición. Está por ver como su nuevo Presidente de carácter nacionalista actúa.
En cabeza China ha visto como se frenan sus exportaciones y siendo afectada por ya no ser tan atractiva para las multinacionales por el crecimiento salarial del 40% reduciendo el crecimiento de su PIB. No obstante pese a esos problemas sigue creciendo y tiene un mercado urbano cada vez más numeroso por la migración del campo a las urbes.
Se puede afirmar que quien tira del carro de los BRICS es China a la que le interesa tener una posición de pujanza, además de aliados políticos entre los emergentes y que mejor que sus actuales socios, pero a la vez es también una cuestión estratégica de crecimiento. Le interesa tener acceso a los recursos energéticos de Rusia y gracias al Banco que quieren materializar podrá extender su influencia económica sobre los países emergentes incluyendo sus compañeros del BRICS, no es preciso recordar su gran presencia adquirida en África y su introducción con paso firme en Latinoamérica.
Los MINT aún deben recorrer un gran camino para desbancar al BRICS aunque todo dependerá de la capacidad de China, y de los intereses de esta, por tirar de su grupo ¿Pero realmente podrá el combinado alternativo superar al polo emergente? Particularmente tengo serias dudas pues salvo Tailandia todos los demás tienen crisis que afrontar (el asunto de las reivindicaciones del sur de mayoría musulmana por escindirse es menos relevante que en otras épocas); Méjico lleva más de un año afectado por la lacra de la inseguridad y el narcotráfico resultando lastrado por ello, Indonesia tiene un crecimiento no estabilizado y resulto muy perjudicada por la crisis de la devaluación de divisas, mientras que Nigeria tiene un conflicto interno por la división del país y el crecimiento del grupo terrorista Boko Haram.
Es más fácil pensar que surgirá un grupo alternativo con Vietnam, considerado la nueva China, junto con Filipinas la cual es considerada como una de las futuras once economías del mundo dentro de unos lustros, Argelia que está teniendo por general estabilidad y crecimiento estable, sin poder olvidarnos de Tailandia, mientras que por América podría mencionarse Chile pero no al nivel de los anteriores pues Venezuela con la crisis económica que padece no puede considerarse ni Argentina por sus crisis de deuda sin olvidarnos de una posible Colombia estable si se alcanza la paz definitiva actualmente en negociaciones. Ese será el polo de crecimiento mientras que el BRICS seguirá conservando el peso político. No obstante no puede descartarse la mejora de la situación futura de Méjico ni la irrupción del prometedor Senegal, que se vio frenado hace años, además no es de extrañar que China se integre en los grupos de poder de los países desarrollados siendo posible verla incluso en el G8 máxime que ahora Rusia ha sido excluida con lo que China dejaría de tirar del BRICS propiciando la caída de este.
MIGUEL ÁNGEL – 17-7-2014