En este momento parece que se puede poner fin a esa herida pero suenan indicadores preocupantes de vez en cuando recordando que el camino puede desandarse en cualquier momento.
Tiempo atrás fueron los secuestros de las FARC y ahora los ataques guerrilleros así como los bombardeos del ejército.
Hay una importante negociación en marcha en La Habana con Noruega y Cuba como intermediarios entre las FARC y el gobierno colombiano de Juan Manuel Santos. La estructura de la misma es bastante sólida y se van realizando progresos importantes en diversas etapas.
Sin embargo sobre el terreno del conflicto la tensión es máxima. Las tiranteces que se provocan al negociar sin un alto el fuego condujeron a varios momentos de tensión. Finalmente este fuese decretado por las FARC, que en varios períodos no se cumplió completamente, pero ahora se ha roto tras los últimos enfrentamientos acaecidos volviendo al escenario de grave tensión.
El proceso de diálogo que se realiza en La Habana, capital de Cuba, está organizado en varios capítulos; Buscar una solución final al conflicto, tema de la tierra, drogas, participación política y comisión de la verdad.
Respecto al punto de la tierra las FARC tienen entre una de sus demandas ideológicas hacer una reforma colectivista cosa que naturalmente el gobierno que garantiza la propiedad privada no acepta. Un posible punto de encuentro que se baraja es crear territorios campesinos donde se realice una especie de cooperativas agrícolas repartiendo tierras, la ubicación de los mismos sería una discordia.
En cuanto a las drogas la guerrilla ha estado financiándose con el narcotráfico y la plantación es un escollo importante. Hay un principio de acuerdo en la eliminación de las mismas respetando el cultivo en aquellas zonas donde este práctica desde hace mucho tiempo, no obstante la forma de destrucción es un punto de fricción pues las FARC quieren que sea manualmente.
La participación política es complicada pues la pretensión de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia pretenden presentarse directamente a las elecciones. Se debate la posibilidad de que se creen zonas especiales temporales bajo control actual de la guerrilla, que actuarían como circunscripciones electorales para mandar un número por determinar de diputados al Congreso.
Cerrar heridas también es un tema crucial y una comisión ha sido abierta para dilucidar quienes son las víctimas y como repararlas. En las FARC pretenden que su lucha quede reflejada queriendo que se incluya la represión al movimiento de Gaitán y colectivos como sindicalistas e indígenas que tuvieron sus choques con el gobierno colombiano a mitad del S. XX.
Finalmente el espinoso asunto del fin material del conflicto. La entrega de armas sería bastante difícil de lograr y las intenciones de las FARC son que se incluya una amnistía y una reestructuración del ejército colombiano.
Que se alcance un acuerdo sobre todo ello es complicado y encima se le suman varias impedimentos; El estatuto de Roma que dificulta la participación política a condenados por delito de lesa humanidad, la verificación del desarme completo de la guerrilla que puede durar bastante tiempo, la controversia y problemas de seguridad si las FARC se presentasen a unas elecciones, el ELN (Ejército de Liberación Nacional) aún no ha iniciado un proceso de negociación para poner fin a su actividad y parte de la sociedad puede alzarse en contra si se cede mucho ante las FARC.
El anterior Presidente, Álvaro Uribe, esta de forma activa participando en la oposición a la negociación con las FARC. La ferocidad es bastante notoria y recibe apoyos por no haber un cese de las hostilidades en firme.
El gobierno de Santos está a la defensiva y ha prometido un referéndum para ratificar los acuerdos que se alcancen, algo a lo que se opone la guerrilla.
Está por ver cómo evolucionan los acontecimientos.
Como se ha detallado llegar a un acuerdo es difícil por los temas a abordar y la situación sobre el terreno, aunque la voluntad de las partes por llegar a un entendimiento definitivo parece firme dado que el gobierno colombiano está muy implicado (la batalla política entre Santos y Uribe incide en ello) y las FARC están debilitadas.
Colombia ha experimentado un gran avance en la última década hacia la resolución del conflicto y en la lucha contra los carteles de la droga. Logros como la desmovilización de las Fuerzas de Autodefensa Colombianas y el éxito del Plan Colombia han sido clave para avanzar hasta las posiciones actuales.
El país está beneficiándose de lo conseguido y uno de los sectores que están despuntando es el del turismo pasando de medio millón de visitantes en 2.003 a casi cuatro millones en 2.013. Un indicativo bastante indicativo del progreso de Colombia en la resolución de su conflicto y de que la seguridad es más palpable.
Publicado en Politicahora
Almacenado en Geopolítica / Análisis / Áreas / América / Sudamérica
MIGUEL ÁNGEL - 18-06-15