En primer lugar el lugar designado, Helsinki, no es casualidad. Finlandia fue neutral durante la Guerra Fría y aunque ahora sopesa unirse a la OTAN sigue manteniendo su neutralidad, la cual lo es de verdad en la práctica al contrario que Suecia, por lo que es un lugar muy conveniente para un encuentro en el actual clima de tensión y especialmente en tiempos de profundos desencuentros entre EEUU y Rusia.
Sin ánimo de hacer más que un breve análisis se puede abordar de pasada que EEUU y Rusia no pretenden llevarse tan mal y que sus gobiernos han visto sobrevenido delos acontecimientos.
Por una parte Rusia vio la caída de Yanukovick en Ucrania como un peligro para sus grandes intereses y actuó de forma desproporcionada, aunque hay que entender lo que se jugaba, anexionandoser Crimea y buscando crear desgajar las zonas rusofonas de Ucrania consiguiendo un colchón, e interviniendo en Siria para salvar a su aliado Assad peto ese es un tema más complejo y con muchas derivadas. Por contra EEUU perplejo sin haber previsto los acontecimiento y con torpeza fue reaccionando lentamente mandando avisos tu recurriendo a las sanciones contra Rusia más por inercia en su papel de valedor de aliado de Europa y de los países sunnies que conforman el Consejo de cooperación del Golfo que por gusto.
Ni Putin ni Trump desean una nueva Guerra Fría y además económicamente no conviene a nadie, especialmente a Rusia, ni tendrían nada estratégico que ganar en un clima de tensión.
Resolver los desacuerdos entre EEUU y Rusia es algo muy difícil pues sus dos principales desencuentros (Ucrania y Siria) no pueden resolverse fácilmente. En el primero Putin no puede renunciar a la anexión de Crimea y EEUU salvo traición a Ucrania y a sus valores no puede aceptar la anexión rusa. En cuanto al segundo punto la figura de Assad supone un freno para alcanzar cualquier pacto para conseguir un arreglo a la situación siria y a un reparto de influencias.
La reunión simplemente servirá para aflojar la tensión y para con buena predisposición tratar de llegar a acuerdos casi imposibles. Contrasta con el éxito que tuvo la reunión entre EEUU y Corea del Norte, en la que por cierto aunque hubiese buen entendimiento tampoco se firmó nada concreto.
Publicado en Mapeando