El AKP turco necesita fortalecerse internacionalmente y no encontrar estorbos a la purga que esta realizando, por ello acercarse al Kremlin le viene bien para suavizar las críticas de Occidente, temeroso de que Ankara se acerque a Moscú.
Desde la otra parte Putin esta siempre muy atento a desequilibrar el tablero internacional cuando tiene ocasión. Ya lo intentó en Egipto sin mucho éxito y ahora lo intenta con la oportunidad que ofrece la situación turca.
Rusia obtendrá manos libres en Ucrania y Turquía en Siria, un pacto no de máximos pues el AKP no puede olvidarse de los tártaros y el Kremlin no puede dejar caer a Al-Assad.
Los sucesos de aumento de tensión en Ucrania y la ofensiva turca en Siria de los últimos días son muestra clara de este pacto.
¿Hasta donde llegará la creación de entendimiento y progresiva colaboración estratégica de Ankara y Moscú? Si tenemos en cuenta que tienen intereses contrapuestos y pertenencia a bloques geopolíticos antagónicos en teoría sería poca, aunque los beneficios de esta alianza puntual pueden fortalecer los lazos y quebrar a medio plazo la separación geopolítica que les separa.
Publicado en Mapeando
MIGUEL ÁNGEL - 25-8-16