Han tenido que pasar varios meses y producirse agrias discusiones, las cuales han dañado mucho la imagen de la organización y reavivado tensiones entre socios.
Toda organización supranacional es una conjunción de intereses de los Estados que la conforman. Luchan para defender sus intereses y conseguir el mayor beneficio posible aportando lo mínimo posible. Hasta ahí todo normal.
sin embargo la UE no es cualquier organización supranacional. Su espíritu fundacional es éticamente elevado y tiene mecanismos muy elaborados en su administración, así como con un nivel de colaboración elevadísimo. Espor ello que hay que exigirle más y no ha estado a la altura, no la estructura sino los miembros que la conforman.
Los países frugales han sido tremendamente insolidarios ¿Que es eso de dar dinero en parte a fondo perdido y en parte en créditos, todo ello condicionado a que actúen como ellos estimen oportuno? No casa con el espíritu de la UE.
Por otra parte los países más necesitados se han limitado a pedir cuanto más dinero posible sin concretar los proyectos en el que se invertirá. Algo incoherente.
Más pormenorizadamente analizaré el acuerdo pero salta a la vista que supone un antes y un después. Tanto por las transformaciones que se harán como por la forma en que se pondrá el dinero, con lo que implicará, y la gestión que se haga.
Publicado en Mapeando (Página de Facebook)